viernes, 8 de noviembre de 2013

Alguna vez te dijeron...

Alguna vez te dijeron que el “amor de tu vida” aparece una vez, usualmente antes de los 30 años.

Olvidaron mencionarte que el amor no está predeterminado.

Alguna vez te dijeron que tienes una media naranja y que tu vida solamente tendrá algún sentido si encuentras la otra mitad.

Olvidaron mencionarte que naciste entero y que nadie está obligado a cargar en sus espaldas el compromiso de llenar aquello que te hace falta.

Crecerás a través de las personas.

Acompañado es mejor.

Alguna vez te dijeron que “dos en uno” es lo ideal.
Dos personas siendo una sola
pensando y actuando igual.

Que esto es la fórmula que funciona.

Olvidaron mencionarte que eso se llama anulación.

Que siendo tu mismo, con personalidad única
Podrás tener una relación sana.

Alguna vez te dijeron que el matrimonio es obligatorio
y que tus deseos fuera de él deberás reprimirlos.

Alguna vez te dijeron que las personas delgadas y bonitas son más queridas.

Alguna vez te dijeron que existe una sola manera de ser feliz
Igual para el resto, y quienes no la sigan
serán marginados.

No te dijeron que estos paradigmas
están equivocados, agobian a las personas y son alienadas.

Que puedes intentar otras alternativas.

Tampoco te dijeron que nadie
Te diría esto: lo tendrás que descubrir solo, como todos.

Y entonces,

cuando te enamores de ti

Serás muy feliz y te enamorarás de alguien más.

domingo, 3 de noviembre de 2013

¿Te acuerdas?

¿Te acuerdas de aquellos días en los que nada importaba?, ni el antes, ni el después... sólo el ahora, el momentos, los instantes...

¿Te acuerdas de las ansias de vernos así fuera por 5 minutos o menos?, en que los días eran cortos y las noches largas...

¿Te acuerdas que no habían motivos para encontrarnos, ni excusas para alejarnos? Todo fluía como fluye el agua de un río

¿Te acuerdas de las ganas que teníamos de escondernos en nuestro mundo? olvidarnos del resto... sólo tu y yo

¿Te acuerdas?... o ¿lo olvidas?

lunes, 14 de octubre de 2013

Momento Sublime

El dulce frío de las gotas del rocío, rozaba mi piel aquel amanecer en el que andaba por el pequeño camino de piedras, donde me besaste una mañana de primavera. Como un sueño lúcido recuerdo aquel día cuando nos encontramos desprevenidamente sin emitir alguna palabra. La brisa tocaba su suave melodía y las aves danzaban sin rumbo llenas de alegría.

Te recuerdo perfectamente frente a mí, esa fría mañana de primavera, sin habla, sin nada que decir a través de tu boca. Tu mirada perpetua, fija en la mía, recuerdo escuchar lo que decía. En voz baja tus ojos castaños me llamaban desde lejos y me suplicaban que me acercara.

Recuerdo tu sutil aroma a canela por la mañana que impregnaba aquel lugar en el que coincidimos casualmente ese hermoso día primaveral. Tus ojos brillaron al verme y sentí una punzada en mi estómago, una energía electrizante que atrapó todo mi cuerpo, todo mi ser. Sin encontrar alguna lógica en esa sensación, me dejé llevar por mi intuición y me acerqué a ti...

Como si el tiempo se hubiera detenido, siento tus labios en las comisuras de los míos, suaves y dulces


domingo, 13 de octubre de 2013

Pequeño amor de mi vida

Desde pequeña, había pensado en casarme con un chico. De hecho, a los nueve años conocí a un niño y me enamoré de él. Me enamoré de nuestros encuentros, de sus regalos, de las palabras que intercambiamos. Para esa edad conocí el amor como un soplo de viento, como una estrella fugaz que te ilusiona y de repente termina.

Apenas pasaron tres años cuando me enteré de la terrible noticia. Lo recuerdo bien, una mañana de enero mientras pensaba en volverlo a ver... Personalmente, ese final fue trágico para lo poco que había vivido. Fue como si me arrebataran el alma. Para la edad que tenía no pensé que mi pequeño amor se iría de mi vida...

viernes, 9 de agosto de 2013

Si tuviera que describirte diría...

Si tuviera que describirte diría que...

Lloras como un día de lluvia y me gritas cual relámpago cercano en el cielo. Me abrazas como si fuera a irme y me besas como si fuese lo más delicioso que tus labios jamás han probado.

Sonríes como un amanecer luminoso y te enserias como una tarde nublada. Eres tempestad, y a la vez calma. Eres esto y a la vez aquello que tu mente no descansa, eres cálida y fría, dulce y amarga.

Eres aquello que creas en tu día a día, lo que tus ojos miran y tu mente razona. Eres lo que tu corazón guía y lo que tu alma invoca...

Eres pura como un cielo sin nubes de sentimientos frágiles al tacto de mis manos ansiosas. Eres fuerte en tus decisiones y motivos, como un trueno que se hace sentir.

Eres tan única y cambiante que cada día es diferente al anterior...